Gema y yo nos vamos a Ucrania. Desde Kiev
nos desplazaremos a Zoryn, a 35 kilómetros de Chernobyl, para estar con Iván.
Iván Marchenko es el chaval que desde hace cinco años venía a pasar con
nosotros los veranos. Este último enfermó de gravedad y prácticamente lo
pasamos entre el Hospital Donostia y el de Cruces.
Hubo que demorar su regreso y, cuando llegó a
Kiev, fue sometido a una severa operación para repararle la aorta, dañada
gravemente por su enfermedad.
Estaremos una semana con él, lo llevaremos a
Kiev y trataremos de obtener información directa de su actual estado y de su
evolución. También procuraremos proveerle de algunas necesidades materiales que
mejoren su calidad de vida.
Esto se hace gracias a la campaña de
recaudación de fondos que puso en marcha la Asociación Chernobyl Elkartea, que
es la organización que gestiona la estancia de niños ucranianos entre las familias
vascas.
Vamos esperanzados, preocupados,
ilusionados… Veremos. A la vuelta lo contaremos. Hasta entonces este blog
permanecerá con la persiana bajada.
Recibida la foto. La máquina de Iván (Del Baracefano je je) funciona muy bien. Muchos abrazos para él, besos creo que no le gustarán mas que de las chavalas.
ResponderEliminarQue tengais buen viaje. Ya nos contareis cómo le va a Ivan y cómo les va a los demás, a las gentes de esa tierra que, seguro, a pesar de todo, también tienen esperanza.
ResponderEliminar¿Has leído la última que escribió Vasili Grossman? Se titula "Todo fluye" y es todavía más dura que "Vida y destino"
Bittor