jueves, 31 de enero de 2013

No nos entienden


A los hombres, digo. Hoy quiero utilizar este espacio para expresar mi estupor ante un Decreto sorprendente. Resulta que el Ministerio de Empleo y Seguridad Social ha actualizado las cantidades que se deben percibir en concepto de indemnización por lesiones, mutilaciones y deformidades de carácter definitivo y no invalidante.

El resultado es un desconocimiento absoluto de la mentalidad masculina, de su capacidad uni-neuronal, de sus inquietudes y de sus temores. Si usted sigue leyendo verá un par de ejemplos con los que no tendrá más remedio que darme la razón.

Veamos. Por la pérdida anatómica o funcional de un riñón se percibirán 4.260€, mientras que si lo que se pierde es un testículo, la indemnización asciende a 2.840€. ¿Alguien que conozca a los hombres puede creer que éstos valoren más un riñón que un testículo? ¡Vamos hombre!

Pero no acaba ahí la cosa. Usted puede perder la nariz, por lo que será indemnizado con 7.940€, pero ¡ay! si lo que sufre es una pérdida total del pene, no recibirá más que 6.810€ (!!!). Yo le reto a la Ministra del ramo a que haga una encuesta entre los hombres con una pregunta muy sencilla: ¿Qué prefiere usted, perder la nariz o el miembro? Y no tengan duda del resultado: el personal optará por mantener el pene por una mayoría que quizás llegue al 105% del censo, como en los referéndums de algunas dictaduras. Los hombres somos así: no nos importa nada ser chatos. Y si alguno estuviera acomplejado siempre puede recurrir a artilugios como el de la imagen. Pero andar por la vida sin miembro... Quita, quita, sería como pretender que un barco navegue sin timón.

Nuestra masculina idiosincrasia se resume en un conocido chiste que mi amigo Juan Carlos Fano cuenta con su habitual gracejo. Un hombre pide una cajetilla de tabaco en un estanco. Le dan una donde pone: “Fumar produce impotencia”. Al leerlo, el hombre suelta la cajetilla como si fuera radiactiva y le urge al dependiente: “Deme una donde ponga eso de que fumar mata, ¡hombre!”. Pues eso.


miércoles, 30 de enero de 2013

A ver las olas


Si Aureliano Buendía siempre recordaría el día en que su padre le llevó a ver el hielo, estas líneas son para no olvidar el día que fuimos a ver las olas que la ciclogénesis iba dejando en el litoral. El litoral no es solo una afamada marca de fabadas en conserva, también se denomina así a la costa. Y lo aclaro por si la normalización de palabras tan extrañas como la citada ciclogénesis nos llevara a olvidar el significado de otras mucho más vulgares.

En el Kursaal. Foto de José Juan Gurrutxaga. Sentados: Aitor, Karmele,
 Rafa, Beris y Josema. Agachados: Javier, Txema, Carlos e Igor.
Bien, salimos de Anoeta los que aparecemos en la foto, y aquí cabe hacer dos precisiones. La primera, es que en Anoeta apareció Vicente Mier, el veterano korrikalari y gran amigo, al que siempre recibimos con alegría. Pero se desvió hacia su casa antes de llegar al Kursaal, razón por la que no sale en la imagen. La segunda precisión es que la fotografía es obra de José Juan Gurrutxaga, uno de los mejores fotógrafos que conozco. Hasta tal extremo las olas se debieron percatar de la categoría del autor que, presas de los nervios, protagonizaron un gatillazo, es decir, se mostraron mohínas, incapaces de mantenerse erectas. Naturalmente, la ola que rompe con violencia en el Paseo Nuevo se debe al PhotoShop y a mi mano, y no a la ciclogénesis. Un fraude, oiga.

El entrenamiento discurrió con normalidad. Desde Anoeta a Sagüés, pasando por el parque de Cristina-enea. La ida, tranquila; la vuelta, a buen ritmo. Mikel Beristain y luego Aitor Bellosillo se encargaron de ponernos en fila de a uno hasta llegar de nuevo a Anoeta, tras cubrir 10,5 kms.. Una agradable salida, unos compañeros amables, un tiempo primaveral y una charla amena -a la ida-... ¿Qué más se puede pedir?

El entrenamiento de hoy era una puesta a punto para la carrera que tenemos el día 10 de febrero. Nos vamos a enfrentar al recorrido del Cross de San Hilario en Miramón, que este año ha dejado de celebrarse. Son tres vueltas a un circuito rompepiernas de 2,5 kilómetros cada una.

Hay varios favoritos. Yo creo que ganará Mikel Beristain, seguido de Gorka Busto, de Iñaki Zubimendi y de Aitor Bellosillo, si es que Igor Ayerbe decide pasearse, porque si opta por competir… Luego entrarán Pepelu Fonseca, Txema Lakidain y Carlos Hernando, Rafa Azurza, Pello Esnaola, Josema Brosa… y luego los demás. Esto es lo que me dice mi infalible bola de cristal... que se equivoca casi siempre.




martes, 29 de enero de 2013

Informar... y verificar la información


La función principal de un periodista es informar, cosa que requiere la cautela de contrastar la información, esto es, cerciorarse de que aquello que se va a contar es cierto. Luego está el oficio -su talento para escribir o comunicar-, y luego el criterio, que consiste en jerarquizar adecuadamente la noticia.

Pero todo se viene abajo si no se ha respetado la verdad. No importa si ha sido por voluntad o por negligencia, como le ha ocurrido a “El País” con la falsa fotografía de Chávez entubado.

Hoy, sobre todo hoy, la función de la prensa solo tiene sentido si es capaz de separarse del formidable volumen de pseudo información que circula por Internet. Por ello es necesario extremar la veracidad de las noticias y la fiabilidad de las fuentes. Que el principal diario español no haya tenido en cuenta este elemental criterio ha supuesto que haya incurrido en lo que él mismo califica como uno de los mayores errores de su historia.

Una agencia ofreció la foto a “El País” por 30.000€. Se negoció el precio, que quedó en 15.000€, pese a todas las dudas y suspicacias que se produjeron entre los directivos del periódico ante la escasa fiabilidad de la agencia, al mantener esta al autor de la foto en el anonimato. De hecho, "El Mundo" rechazó su publicación. Pese a ello, se ordenó insertar la foto en portada.

El resto es conocido: a poco de distribuirse el periódico se confirma que la foto es falsa (procede de un vídeo grabado en 2008 a un enfermo que no es Chávez). Se ordena abortar la distribución pero un pequeño porcentaje de periódicos llega a sus destinos, algunos de ellos en Sudamérica. El escándalo está montado y “El País” debe rehacer su tirada y redistribuirla, lo que supone un coste de 225.000€.

Este error, que ha supuesto un formidable descrédito para el diario, siembra dudas sobre la profesionalidad de sus responsables. Pero además crea un interrogante sobre su criterio informativo. No parece razonable pagar semejante importe por una imagen que, sin pie de foto ni crónica adjunta, sirve para muy poco, salvo para alimentar el morbo del lector. Y eso en el supuesto de que la foto no hubiera sido falsa.

lunes, 28 de enero de 2013

Se nos muere Europa


Hoy lunes se presenta en París el Manifiesto por la Unión, una declaración firmada por un grupo de intelectuales como Claudio Magris, Antonio Lobo Antunes, Bernard-Henri Lévy, Fernando Savater y Salman Rushdie entre otros.

Es un texto sin hojarasca, un golpe directo al hígado. Vea su comienzo: “Europa no está en crisis, está muriéndose. No Europa como territorio, naturalmente. Sino Europa como Idea. Europa como sueño y como proyecto…”.

Es una denuncia lúcida del silencio, del cinismo, del populismo y de la falta de solidaridad que se ha enseñoreado de la opinión y de la política europea y que está retrasando su imprescindible unidad política.

Para corroborar este aldeanismo, su cortedad de miras, no hay más que fijarse en David Cameron, que para contentar a unos pocos de su partido es capaz de levantar una colosal incertidumbre con el anuncio de un referéndum en el 2017 sobre la permanencia británica en Europa.

Pero no hace falta cruzar el Canal de la Mancha. Aquí, a unos cientos de kilómetros, el Honorable Mas propone también otro referéndum en el 2014 para sacar a Cataluña de España. Y aquí mismo, en Euskadi, existe un notable porcentaje de la población con parecida exigencia.

Es decir, cuando más se necesitan políticas de integración, centrípetas, es cuando con más decisión enchufamos la centrifugadora. Es un error grave, que lo pagaremos, y socialmente es un desastre. Yo al menos, un ciudadano vulgar, no quiero recluirme solo con los míos, ni uniformarme, ni pertenecer a una sociedad homogénea, ni poner fronteras ni barreras. Prefiero la diferencia, lo nuevo, lo heterogéneo, lo no conocido, lo que va a despertar mi curiosidad y donde voy a poder elegir más y mejor. Ni Euskadi, ni España: es hora de apostar por Europa.


viernes, 25 de enero de 2013

Paradojas en Euskadi


Gracias a la Ley de Territorios Históricos de 1983 -que supondría la ruptura del PNV entre centralistas y foralistas al imponer estos sus tesis, y la creación de EA- la Comunidad Autónoma Vasca goza de una particularidad: sus máximos órganos de representación, el Parlamento Vasco y el Gobierno Vasco, carecen de autoridad para determinar o ejecutar la política fiscal, que queda como competencia exclusiva de las Juntas Generales de cada provincia.

Esta ausencia de armonización fiscal supone que en Álava se pueda tributar de forma distinta que en cualquiera de los otros dos territorios históricos y viceversa. No hará falta subrayar las diferencias programáticas que existen entre Bildu (Gipuzkoa), PP (Alava) y PNV (Bizkaia) en materia impositiva para hacer visible esta posibilidad.

Pero siendo éste un asunto delicado, no es lo único negativo de esta situación tan singular. Porque esta distribución de competencias lo que hace es crear una red de duplicidades y clientelismo que termina por lastrar el bolsillo de los contribuyentes.

El representante de UPyD, Gorka Maneiro, pidió una reforma profunda de la Ley de Territorios Históricos porque “no se entiende y no es razonable que una comunidad autónoma como la vasca, de 2,2 millones de habitantes y 7.200 km2. tenga cuatro parlamentos, cuatro gobiernos, tres políticas fiscales y tres haciendas”.

Patxi López, al final de su mandato, también realizó una propuesta similar y ambos políticos cifraron en 400 millones de euros el coste de las ineficiencias y duplicidades que genera la LTH. Me habría gustado que el PSE hubiera hecho esta propuesta a comienzos y no al final de la legislatura, cuando no quedaba tiempo para llevarla a cabo.

Pero además de diferencias tributarias y de ineficiencias y duplicidades, hay una cosa que clama al cielo: la afición que tenemos en este país a los fueros y a los derechos históricos. No he conocido asunto tan antidemocrático como que el deseo de los muertos prevalezca sobre la voluntad de los vivos.


jueves, 24 de enero de 2013

Malos reyes, muchas leyes

Nuestros gobernantes tienen que hacer cumplir la ley, sí,  pero lo que más les gusta es hacer leyes. Y si no se cumplen, ya prepararán otra ley para conseguirlo. Si violan a una niña, nueva ley más sancionadora; ¿que la gente desconfía de las administraciones?, ley de transparencia al canto; ¿que hay dudas sobre las pensiones?, nueva ley de sostenibilidad de las pensiones; ¿que los desahucios se han convertido en un escándalo?, marchando una ley sobre desahucios. Y así hasta el hartazgo.

Cuando queremos acallar a la opinión pública elaboramos una ley; cuando queremos que funcione lo que no funciona, ídem de ídem… Es como si careciéramos de legislación suficiente, cuando lo que tenemos es legislación de sobra. Tomen nota: en España existen más de 100.000 leyes. ¿No sería más juicioso trabajar para que se cumplan las leyes vigentes en vez de emplear el tiempo en crear nuevas?

Pues no: se legisla en caliente como si la ley fuera el remedio inmediato. Luego vienen las disposiciones, las normas, los reglamentos… No le faltaba razón a Juan Rosell, el Presidente de la CEOE, cuando afirmaba que nuestro país es un galimatías legal. Lo que decía el viejo refrán: Malos reyes, muchas leyes.

Ahora, con el caso Bárcenas, el Gobierno del PP quiere proponer a los demás partidos un pacto contra la corrupción, pacto que seguro que acabará en una nueva ley. Y sin embargo, los principales partidos políticos no deberían esforzarse demasiado en promulgar leyes contra la corrupción- que la tienen instalada dentro-, bastaría con que extendieran entre sus miembros el sentido de la decencia.





miércoles, 23 de enero de 2013

Django desencadenado


Se aproxima la fecha de los Oscars, y las películas que aspiran a alguna de las estatuillas se suceden en las carteleras. Una de ellas es “Django desencadenado”, el western dirigido por Quentin Tarantino que acaba de estrenarse en las pantallas.

Ya se rodó en 1966 un largometraje con parecido título -"Django" a secas- y parecido argumento, dentro de la saga entonces tan en boga de spaghetti western. Aquel film fue protagonizado precisamente por Franco Nero, que también participa en este reciente film, y donde el recordado José Bódalo tuvo un papel protagonista.

Pero volvamos al film de Tarantino. Un cazarrecompensas de origen alemán (Christoph Waltz) libera a un esclavo negro denominado Django (Jamie Foxx), para que le ayude a dar caza a unos delincuentes por cuya captura, vivos o muertos, se ofrece una abultada cantidad de dinero. El esclavo se asociará al cazador de fugitivos y éste, a cambio, le ayudará a rescatar a su esposa –también esclava- que fue vendida al perverso dueño de una plantación de algodón (Leonardo DiCaprio).

Esta es la trama del largometraje de Quentin Tarantino, donde también participan Kerry Washington, en el papel de la esposa de Django, Samuel L. Jackson y, con pequeños papeles, Don Johnson, Franco Nero y el propio Tarantino.

Las primeras escenas de la película son impactantes, con una interpretación soberbia de Christoph Waltz que le ha valido para estar nominado al Oscar al mejor actor secundario. Es un comienzo que atrapa al espectador y mantiene su interés a lo largo de todo el largometraje… hasta la última media hora, donde no decae la acción pero es un postre innecesario que no aporta absolutamente nada a la historia.

Eso le sobra al film: treinta minutos… y treinta litros de sangre. Pero es Tarantino, amigos: un exceso sí, pero de cine. Háganme caso: no se pierdan la película.


martes, 22 de enero de 2013

Pasen y vean


Sí, me pregunto yo qué pensarán Regina Otaola o María San Gil, o los demás concejales del PP en Euskadi. Me pregunto qué dirían Gregorio Ordóñez, Manuel Indiano, Jesús María Pedrosa o tantos otros que fueron asesinados por defender la Constitución y la democracia. Qué dirían si vieran este circo nauseabundo, donde el que fue Tesorero de su partido presuntamente acumula una fortuna de 22 millones de euros que, para más INRI, la mantiene fuera de España. Tesorero que también era senador nada menos. Representante del pueblo.

Luis Bárcenas
Yo discrepo de muchas de las cosas que hacen los dos grandes partidos, el PSOE y el PP, pero jamás dejaré de reconocer el extraordinario valor de sus militantes y cargos públicos en Euskadi. El que todos pudiéramos ser un poco más libres ha sido a costa de que todos ellos perdieran su libertad y muchos la vida.

Pero mientras ellos engrandecían la democracia con su entrega, había quienes se encargaban de engrandecer su patrimonio. Cada uno con su afán. Y cuando ocurre este escándalo, la Secretaria General farfulla excusas y proclamas vacías, y el  Presidente del partido y del Gobierno se escuda tras un ominoso silencio. Pasen y vean: esto es la democracia.



viernes, 18 de enero de 2013

¡Oh, el ídolo era de barro!

Ya estamos tranquilos: Lance Amstrong ha confesado que se dopaba. Por fin. Sabíamos que dieron positivo en los controles antidoping Iván Basso, Alex Zülle, Jan Ulrich, Joseba Beloki, Floyd Landis, Marco Pantani, Alberto Contador, Alejandro Valverde, Roberto Heras y un larguísimo etcétera de primeras figuras y no tan primeras, como Mikel Astarloza, Oscar Sevilla, Triki Beltrán, Igor Astarloa, Iván Mayo, Aitor González y otro prolongadísimo etcétera. Es decir, la gran mayoría de ciclistas. ¡Pero Armstrong no, por Dios!

Tour 2005. Basso, Armstrong y Ulrich. ¿Quién no consumía?
Y el causante de esta situación de dopaje indiscriminado –su absurda justificación- no es la dureza del Tour o del Giro, no. Hoy sabemos que el dopaje se ha extendido hasta las pruebas de velocidad en el atletismo (Ben Johnson y Marion Jones, atletas de 100 metros, también fueron cazados), por lo tanto dejemos de hablar de las gestas del ciclismo, de la épica, del final agónico… Es un deporte donde se colectivizó la práctica del doping y cada ciclista novicio que llegaba –como en casi todos los órdenes de la vida- hacía lo que veía hacer a los demás. La antigua conseja: "Allá donde fueres haz lo que vieres".

Pero esto que era vox-populi ha sido silenciado por todos, periodistas incluídos, con la estúpida pretensión de no querer dañar al ciclismo. De nada sirvió el aparatoso endurecimiento de la normativa sobre dopaje hasta extremos ridículos, donde inhalar Ventolín daba positivo. Con el incremento de las normas solo se incrementaron las mentiras y las añagazas para eludirlas. iY ahora la gente, entre ellos muchos que sabían y callaron, se escandalizan por lo de Armstrong!

Se sabe que hay sustancias que mejoran el rendimiento de los deportistas. Y por lo visto, Armstrong –sin recurrir a ellas y tras reponerse de un cáncer- era superior a todos los demás, que sí las consumían. Y han tenido que pasar diez años para que nos descubran que los Reyes Magos son los padres. Amén.

Pero nada, sigamos con esta política hipócrita de aparentar limpiar el ciclismo de hoy destapando escándalos de ayer. Sigamos con Indurain y lleguemos hasta Bahamontes si es preciso. Pero sobre lo esencial, sobre la situación del ciclismo hoy y la sombra –es un decir- de sospecha que le acompaña, ¿qué hacemos? Silencio.



jueves, 17 de enero de 2013

Un lluvioso martes


Hace unos años le preguntaron a Josep Borrell por el papel de la izquierda: “Limitar el poder del dinero sobre el hombre y del hombre sobre la naturaleza”, respondió. Una respuesta original… pero inexacta. No hablaré del dinero, porque hablar de dinero es una ordinariez, pero sí diré que el hombre carece de poder sobre la naturaleza. Basta una copiosa nevada o una lluvia persistente como la que estamos padeciendo para certificarlo.

De pie: Javier B., Txema Lakidain, Pepelu Fonseca,
Pello Esnaola y Gorka Busto. Agachados: Mikel Beristain,
Karmele Mitxelena, Rafa Azurza y Aitor Bellosillo
Precisamente este martes, cuando media Gipuzkoa quedaba anegada por las lluvias, salimos a correr desde Anoeta los nueve que aparecemos en la foto. Eran las tres de la tarde y partimos hacia Astigarraga, para comprobar in situ la extensión de las inundaciones.

Fuimos por Loiola, donde se podía observar la crecida que llevaba el Urumea, pasamos por la Cárcel de Martutene y, justo en el puente, seguimos por la carretera que bordea el río. Tuvimos que zambullirnos en un enorme charco que inundaba la carretera y continuamos unos metros hasta que a la altura del paso a nivel pudimos observar que todas las huertas de la vega se habían convertido en un inmenso lago. 

Tuvimos que dar la vuelta porque no se podía pasar y optamos por tomar el camino que asciende hacia el Golf Basozábal y hasta la zona hospitalaria. Es una subida no muy larga pero exigente, que consiguió dividirnos en varios grupos. Salimos a Miramón y por la Policlínica regresamos a Anoeta, a donde llegamos empapados.

Con el agua tenemos un comportamiento desigual. Puede estar lloviendo más que cuando enterraron a Zafra y vamos tan tranquilos, pero si de repente hay que meterse hasta los tobillos en alguna charca grande unos protestan ruidosamente, otros por no mojarse toman carrerilla y realizan un salto de longitud frenético, y también hay quien cruza el charco de puntillas lanzando agudos grititos de impresión. Unos pocos, en cambio, lo atravesamos en silencio y con elegante zancada.

Luego, nuestras manías con la indumentaria. A Mikel Beristain y a Pepelu Fonseca les agrada ir de raperos; Pello Esnaola suele optar por atuendos vintage ceñidos; Rafa Azurza y Gorka Busto, con modelos tipo culturismo que subrayen sus pectorales; a Aitor Bellosillo le gusta vestir vaporoso, de casual; y al matrimonio Laquidain con sobriedad.

En fin, el GPS marcaba 13,9 kilómetros, efectuados a un ritmo manifiestamente mejorable. Al terminar, como siempre, las endorfinas realizan su labor y nos dejan un cansancio satisfecho. Y esto fue todo, amigos.


miércoles, 16 de enero de 2013

Un delicioso anacronismo


El hábito de la lectura está amenazado por la ansiedad. Tal es el volumen de información que asoma a las pantallas de Internet que es difícil pasar de los titulares. Se cumple el viejo dicho de “quien mucho abarca poco aprieta”. Y luego, los whatsApp’s, los sms y el twitter con sus 140 caracteres. Y con ellos una máxima que se va abriendo paso: si quieres que te lean, escribe poco. Muchas, miles de veces, pero poco cada vez. Escribir una extensión de dos folios es condenarlos a la papelera. 

Hoy en día, cuando carecer no ya de teléfono móvil sino de un smartphone es un signo de marginación tecnológica, la literatura trata de adaptarse a los tiempos, claro. Novelas de acción, de usar y tirar, que se leen con tanta rapidez como se olvidan. ¿Qué quieren? Son los tiempos.

Y en este frenesí, mi proveedora habitual de literatura destroza todas estas líneas escritas y me obsequia con la obra de Rafael Sánchez Ferlosio “Industrias y andanzas de Alfanhuí”. Se trata de una pequeña novela que se publicó nada menos que en 1951.

Y cuando uno entra en sus páginas hay que desconectarse de Internet… y de la realidad. Hay que detener el tiempo y olvidar las prisas, porque Sánchez Ferlosio nos lleva a un mundo fantástico para contarnos las andanzas de un niño, Alfanhuí, por la meseta castellana, donde ya existía el realismo mágico antes de que nos lo descubrieran Juan Rulfo o García Márquez.

Uno recupera su capacidad de sorpresa al comprobar la belleza de la literatura y la maestría de este escritor que, pocos años más tarde, publicaría “El Jarama”, un clásico ya, que supuso la consagración de Rafael Sánchez Ferlosio como uno de los grandes escritores españoles.



martes, 15 de enero de 2013

La nueva clase socialista


Milovan Djilas expuso en su obra “La nueva clase” una durísima crítica al sistema comunista de su país, Yugoslavia, y del resto de países de obediencia soviética. El libro, que se publicó en 1957 y que le supuso al autor un aumento de 10 años de su condena en prisión, denuncia la conversión de los militantes comunistas en una nómina de burócratas que, abandonando el marxismo y sus ideales revolucionarios, se apropian del poder para disfrutar de las prebendas que ellos mismos niegan al proletariado.

Djilas sabía de lo que hablaba: él mismo llegó a ser Vicepresidente de Yugoslavia, aunque las críticas que vertió sobre el régimen le llevaron a ser encarcelado.

Imagen tomada de www.rogerfort.com
Salvando todas las distancias, acabo de leer en el Diario Vasco de hoy un soberbio artículo de Miguel A. de la Calle titulado “Volver a los principios”, donde desvela las claves de la crítica situación del Partido Socialista.

El autor rechaza la tesis de Odón Elorza de “dignificar la política” -la política no es digna o indigna, señala- y propone como tarea urgente buscar socialistas dignos. También denuncia que un porcentaje espectacular de sus cargos hayan tenido, como primer y único medio de vida, al propio Partido, lo que “condiciona seriamente su trabajo político, agranda radicalmente las posibilidades de corrupción, al tiempo que hace imprescindible el poder”. Por otra parte, subraya que los jóvenes que se acercan al Partido “acaban en tiempo récord en jóvenes pervertidos por el poder”.

Es un artículo muy pertinente, válido para el PSE, para el PSOE, y para el resto de partidos y sindicatos, afectados todos ellos por los mismos virus de sumisión al aparato y de ausencia de crítica. Naturalmente, en estas condiciones las posibilidades de que exista una mínima elaboración teórica son inexistentes.

Yo también creo que todo lo demás, como las simplistas propuestas de Odón Elorza, de Chacón o de Rubalcaba, no es sino seguir las consignas del Príncipe de Salina en la obra de Lampedusa: “Cambiar todo para que todo siga igual”.


lunes, 14 de enero de 2013

Caer en barrena


Este sábado pasado se ha celebrado en Bilbao una manifestación multitudinaria exigiendo el acercamiento de los presos de ETA. Nada que objetar, aunque otra cosa sean las declaraciones de algunos protagonistas.

Por ejemplo, las del portavoz de la izquierda abertzale, Pernando Barrena, que manifestó que “Por medio de la movilización vamos a mover a los enemigos de la paz…”. Como es sabido, Barrena ha sido un destacado militante pacifista que siempre ha levantado la voz contra los cientos de asesinatos etarras.

No deja de sorprender, es cierto, que Barrena denomine como “enemigos de la paz” precisamente a quien han sufrido en sus carnes la vulneración continua de la paz y la libertad que ha practicado ETA. Es un estribillo que se lo han aprendido con ese viejo empeño de Goebbels de repetir mil veces la mentira a ver si se convierte en verdad.

Quizás a la expresión “caer en barrena” se le podría añadir ahora una acepción más: cuando la decencia cae en picado.


viernes, 11 de enero de 2013

Tres eran tres


Tres películas: “La noche más negra”, “Los miserables” y “La vida de Pi”. Esta última narra la peripecia de un chaval de la India que, tras naufragar el barco en el que viajaba y que transportaba los animales de un zoo, acaba embarcado en una lancha salvavidas junto con un tigre de bengala. Todas las críticas han puesto a este largometraje por las nubes. A mí me aburrió. Si hay futbolistas que se hinchan de balón, el Director Ang Lee, se ha hinchado de tigre, y con él nosotros. El tigre era muy fiero, pero sobre todo muy canso, como dicen en Navarra.

“La noche más oscura” es un film americano que cuenta la acción de la CIA y del comando militar que acabó con la vida de Osama Bin Laden en territorio pakistaní. La película está dirigida por Kathryn Bigelow, que imprime a la historia la misma tensión que ya mostró en su anterior obra “En tierra hostil”. Quien haya seguido la serie “Homeland” encontrará que la protagonista de “La noche más oscura”, Jessica Chastainn tiene un papel calcado al de Claire Danes en la serie televisiva.

La película tiene un ritmo intenso y mantiene el interés pese a conocerse el desenlace –lo que la equipara con “Argo”, con quien competirá por los Oscars-, y tiene la cualidad de mostrar sin rubor que al imperio las torturas y las fronteras se las trae al pairo.

“Los miserables” es un musical inspirado en la obra del mismo título de Victor Hugo, que fue publicada en 1862. A mí me pareció una película excepcional, con unas interpretaciones brillantes, sobre todo las de Hugh Jackman, Anne Hathaway y Amanda Seyfried, y con un decepcionante Russell Crowe que nos deja convencidos de que el género musical no es lo suyo. El film nos cuenta la persecución sin tregua a la que es sometido un expresidiario (Hugh Jackman) por parte de un inhumano policía (Russell Crowe) que le hará fracasar en los intentos de rehacer su vida. Una delicia.




jueves, 10 de enero de 2013

Hace 64 años




Cuando salí del vientre de mi madre, hace exactamente 64 años y mientras le hacían las curas, pedí que me acercaran algún periódico. Me trajeron este ejemplar de La Vanguardia de la izquierda (con perdón), que era del día anterior a mi nacimiento. Mucho han cambiado las cosas desde entonces. Vean si no La Vanguardia de aquel día y la de 60 años después. Que pasen un buen día.









miércoles, 9 de enero de 2013

Depardieu y el fisco


Ese monumental escándalo que ha provocado Gerard Depardieu por haber abandonado Francia… El actor galo ha justificado su marcha por haber pagado en el año 2012 el 85% de impuestos sobre sus ingresos. Yo voy a retener este dato -el 85%- y me voy a olvidar de todo el circo montado por Putin y compañía, y al que el propio actor no ha sido ajeno.

Uno de los elementos fundamentales de la acción política es la redistribución de la renta y la riqueza. Por eso, en casi todos los países existe un sistema tributario progresivo. El quid de la cuestión, como casi todo en la vida, está en los límites… y en las comparaciones.

Todos pensamos que los ricos deben pagar mucho más, porque en esto somos como Sartre, que decía que el infierno son los otros. Los ricos también son siempre otros. Por eso nos gusta a todos ser tan justos: ¡que paguen ellos! Para mí, ricos son Emilio Botín y Amancio Ortega. Pero para un inmigrante subsahariano, rico soy yo. Y qué decir respecto a los límites, que habrá que poner alguno no vaya a ser que se acabe pagando por trabajar. Si ese 85% que declara Depardieu es cierto, es a todas luces una exageración.

Y luego está la hipocresía social en nuestro país, a la que ha dado forma sublime Carlos Boyero en su columna de El País con el siguiente escupitajo al actor galo: “… Es curioso cómo se disipa el patriotismo cuando las enormes ganancias merman un poquito en nombre de la justicia social”.  Releo patriotismo, enormes ganancias, merman un poquito, justicia social… y me agarro la cartera, claro. Boyero, otro justiciero más… con el prójimo. 

El actor ha tenido el descaro de plantarse y no callarse. Yo me sentaría en la frontera a ver el éxodo de muchos de los que se escandalizan por la actitud de Depardieu si es que Hacienda les cobrase lo que a él.

El problema no es que el actor galo se despida a la francesa, que sería lo suyo, lo irritante es que se haya ido dando un portazo.


martes, 8 de enero de 2013

La Navidad ablanda el corazón


En los últimos días de diciembre del 2012, en plenas Navidades, se celebró en Lekeitio un partido entre exjugadores de fútbol de la Real Sociedad y del Athletic de Bilbao. El partido tenía el siguiente lema: “Derechos humanos. Solución. Paz. Presas y presos vascos a Euskal Herria”.

No todos los presos y presas, conste, como bien se encargaron de declarar minutos antes del partido: “Se trata de un partido solidario con los presos de ETA…”. ¡A ver si se iban a colar los comunes entre la riada!

Sorprende –bueno, no mucho, la verdad- esta actitud de los exfutbolistas, su manifiesta sensibilidad con los presos de ETA… y su absoluto y cobarde silencio con las víctimas que estos han producido. Salvo contadísimos casos a título individual, jamás han mostrado de forma colectiva una mínima pizca de solidaridad o de compasión hacia los cientos de asesinados, extorsionados o amenazados por el terrorismo. Ni estando en activo ni como exfutbolistas.

Ese cinismo de apelar a los derechos humanos, conculcados tantas veces y a los que siempre dieron la espalda… Y es que la Navidad ablanda el corazón, sí, pero solo un poco.


lunes, 7 de enero de 2013

Rodeando el Urdaburu


El domingo víspera de Nochebuena salimos por la mañana a dar la vuelta al monte Urdaburu corriendo. Fue una jornada aciaga, desde varios puntos de vista. Primero, porque Mikel Beristain tuvo una avería… en el despertador. Después padeció otra en el GPS, que le hizo llegar con casi una hora de retraso y que obligó a que Carlos Hernando -por problemas de horario- tuviera que volverse a medio camino.

Pero si París bien vale una misa, tratándose de Mikel bien vale una espera, porque luego nos paga el retraso con un manojo de comentarios de los que nadie sale indemne. La verdad es que tampoco salimos ilesos, como luego se verá, de los pedregales y barrizales por donde nos hizo transitar nuestro guía oficial, Pello Esnaola.

Carlos Hernando nos hizo esta foto antes de irse.
 Estamos Javier, Juan Carlos, Josema, Pepelu, Pello y Mikel.
Bien, aparcados los coches al final de la pista que pasa por Cuevas de Landarbaso, emprendimos el recorrido para rodear el Urdaburu. La primera pista, embarrada y con pendiente ascendente ya nos dejó con los músculos tocados. Eso pensábamos entre jadeos… pero estábamos equivocados. Lo peor estaba por llegar.

El circuito, en los escasos momentos en que pude levantar la vista del suelo, disponía de unas vistas espectaculares, especialmente hacia la vertiente del Añarbe. El día había amanecido soleado y con una temperatura agradable. Pero las piedras del camino, como canta el corrido mejicano, nos enseñó que nuestro destino era rodar y rodar. A ello se sumó la frondosa hojarasca que impedía acertar si bajo ella estaba el suelo o estaba la nada. De esto último puede dar fe Josema Brosa, que vio sorprendido en una ocasión cómo su pierna se hundía en una sima por donde casi desaparece de cuerpo entero. Pero bueno, las heridas tampoco presentaban riesgo inminente de gangrenarse, por lo que proseguimos la romería hasta finalizarla en el mismo lugar donde la habíamos comenzado.

Del problema de las piedras, Pepelu Fonseca y yo certificamos ante Notario los peligros de los retorcijones, presentando sendos esguinces en los tobillos. Por su parte, Juan Carlos Fano se lesionó en el soleo, y Mikel Beristain se dañó la rodilla. De esta guisa concluimos la excursión. Más que atletas parecíamos el desembarco de Juan Sebastián Elcano. Cuando nos vio pasar una mujer que estaba en el huerto junto a su caserío, nos saludó nerviosa y se apresuró a meter las gallinas en el corral.

No hará falta subrayar que el único que se fue de rositas fue Pello Esnaola, como viene siendo sospechosamente habitual, sea corriendo o en bici. Consultados los expertos de “Cuarto Milenio”, la única explicación que han encontrado a este fenómeno paranormal es que en su vida anterior, antes de reencarnarse en un ser humano, Pello fue una cabra habituada a brincar por los Picos de Europa.

Terminado el recorrido, Mikel nos obsequió con unas soberbias naranjas que degustamos en comunidad. Pero a pesar de todo, ahora, al recordar nuestra lamentable estampa –embarrados, cojos y maltrechos-, no puedo evitar exclamar: ¡Qué bien lo pasemos